Por: Myrna Iglesias Rodríguez / Dafne Legorreta Galindez
La carrera empresarial de Gisele Sosa Santibáñez, empezó en la incubadora de empresas del Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey, ITESM, y en el 2012 lo hizo oficial de la mano de sus socios. Ella es ingeniera en electrónica y telecomunicaciones, egresada de la Universidad De La Salle Bajío, quien afirma que lo que la llevó a estar en esta industria es el gusto por lo que hace.
Actualmente Gisele es directora comercial de ADITEL Sistemas, sociedad encargada de la formación, certificación, suministro de productos y servicios relacionados con las tecnologías aplicadas a los proyectos de automatización y sistemas de control.
En su empresa, la participación de las mujeres representa el 25% de la plantilla laboral, misma proporción de mujeres que cuando estudiaba ingeniería en la universidad. Ya dentro del ambiente productivo, menciona que el principal reto al que se ha enfrentado es precisamente quitarse prejuicios y capacitarse continuamente.
'Simplemente tirar para adelante sin tener ni que pensar en el género para hacer lo que se tiene que hacer, también por supuesto, formarme constantemente'
Gisele recuerda con simpatía una anécdota que le sucedió personalmente sobre la perspectiva de género que prevalece en el sector productivo en el que ella se desempeña.
'En alguna ocasión, en el ámbito industrial me solicitaron llevar al 'ingeniero' que haría el trabajo, y respondí que al 'ingeniero' que esperan lo tenían enfrente' comentó Gisele sonriendo.
Ella señala la importancia de aprovechar las oportunidades que se presentan y destaca que la primera oportunidad que aprovechó fue la de realizar estudios de maestría en el extranjero, en la Universidad Politécnica de Madrid hace 14 años bajo la modalidad en línea, cuando todavía no se creía en esos métodos. Otra gran oportunidad fue la de replantear el modelo de negocio que pensaban que iba a funcionar en México y comenzar de cero nuevamente, en donde los que antes eran sus competidores se convertirían en sus clientes.
Y destaca que ha contado con mentores dentro de su desarrollo empresarial, principalmente sus socios y otros colegas del sector. Aunque asegura que nunca se deja de aprender en cada proyecto en el que se ve involucrada.
Considera que deben descartarse los estereotipos de género y basarse únicamente en los conocimientos, capacidades y aptitudes. Deshacerse de los estereotipos porque no tienen ninguna utilidad.
Gisele recomienda que las empresas deben tener equilibrio en sus plantillas laborales entre mujeres y hombres, ya que el ambiente cambia, se genera un intercambio de ideas, conocimientos y experiencias de las cuales se puede aprender mucho.
'Entre mujeres es motivante encontrar inspiración en los éxitos de otras para animarse, ver las cosas desde otro ángulo y poner manos a la obra'.
Para impulsar el desarrollo de las mujeres en el ámbito productivo, Gisele hace énfasis en que se necesitan apoyos como guarderías educativas para sus hijos, transporte, programas de capacitación en diversos temas y enseñanza de idiomas, y no escatimar pensando en que luego, esas personas se pueden cambiar de empresa, porque al final estarán aportando al crecimiento de México.
'El mensaje a las mujeres es que demuestren sus conocimientos y capacidades, y encontrarán gente en el camino que las impulsará, como a mí me pasó. Y si se encuentran en circunstancias en donde no se valoren sus virtudes, a lo mejor no es por ahí el camino, así que hay que salir a buscar lo que se merecen, nunca se rindan porque todos los seres humanos merecemos estar en donde todos tienen las mismas oportunidades de crecer', concluyó Gisele.