La relación comercial del sector ferretero entre México y Estados Unidos ha cobrado gran relevancia en 2024 y 2025, impulsada por la creciente dinámica del nearshoring, una mayor inversión en infraestructura, obra pública y autoconstrucción. En 2024, el sector ferretero en México registró un crecimiento cercano al 8%, según estimaciones del sector y comunicados de la Expo Nacional Ferretera, influido por esta reconfiguración industrial y una demanda sostenida de insumos y suministros ferreteros (herramientas, fijaciones, herrajes, tornillería).
Del lado del comercio minorista, la actividad ligada a ferretería, tlapalería y vidrios contribuyó favorablemente a la recuperación del PIB sectorial durante 2024, según datos disponibles en Datamexico (Secretaría de Economía), reflejando la fortaleza del canal minorista formal en segmentos ferreteros. Además, se calcula que existen más de 100,000 ferreterías y tlapalerías en el país, lo cual evidencia tanto la escala como la fragmentación del mercado, con especial concentración en zonas urbanas como la Ciudad de México.
Estados Unidos continúa siendo el principal socio comercial de México. Los datos de la U.S. Census sobre comercio exterior confirma la alta intensidad del flujo bilateral, lo cual impacta directamente al sector ferretero, dado que tanto insumos industriales como productos terminados transitan por esta vía. Este contexto exige especial atención a regulaciones como avisos automáticos de exportación, clasificaciones arancelarias, reglas de origen y posibles ajustes temporales en aranceles para ciertos códigos HS; cuestiones que afectan tiempos, costos y márgenes.
En particular, categorías clave como tornillería, fijaciones, herramientas manuales y eléctricas, herrajes y suministros para obra e industria representan rubros con alta movilización transfronteriza. La demanda creciente de estos insumos se atribuye directamente a proyectos industriales vinculados al nearshoring y la reconfiguración de cadenas globales de suministro. El sector retail-ferretero compite tanto con productos manufacturados en México como con importaciones desde EE. UU. y otros orígenes, nutrido por el dinamismo urbano y la modernización del sector.
No obstante, persisten retos logísticos y aduanales: el cumplimiento estricto de requisitos documentales y normativos, el etiquetado y certificaciones adecuadas, así como la clasificación arancelaria eficaz, son factores clave para evitar demoras y costos elevados. Se han reportado tensiones recientes en materia aduanera en 2025, relacionadas con mayor escrutinio en operaciones fronterizas, lo cual hace indispensable para proveedores ferreteros fortalecer su trazabilidad documental y gestión de cumplimiento.
Estas condiciones, sin embargo, también abren importantes oportunidades prácticas para los actores del sector ferretero. Desarrollar relaciones comerciales con plantas industriales y de manufactura en México que requieren insumos como herramientas, tornillería y suministros de mantenimiento puede representar una fuente estable de demanda.
Asimismo, establecer alianzas con distribuidores en Estados Unidos para acceder a líneas especializadas o exclusivas puede ser un diferenciador clave. Adicionalmente, invertir en logística eficiente, cumplimiento aduanero y digitalización con catálogos online, comercio omnicanal, inventarios integrados y propuestas de valor (como entregas just-in-time o servicio técnico), fortalece la competitividad ante marketplaces y cadenas especializadas.
La relación comercial ferretera México-Estados Unidos para 2024–2025 se caracteriza por una consolidación estratégica. El sector crece con fuerza, apoyado por la actividad industrial y la expansión del retail, y al mismo tiempo demanda mayor profesionalización en logística, regulación y diferenciación. Las empresas que sepan adaptar su oferta ofreciendo calidad, cumplimiento, servicio y canales digitales robustos estarán mejor preparadas para aprovechar esta coyuntura favorable.
Por: ANIERM*
*Asociación Nacional de Importadores y Exportadores de la República Mexicana