De acuerdo a estadísticas reportadas ya sea por el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) o por especialistas en Salud Ocupacional, la incidencia de los accidentes reportados se ha incrementado en los últimos diez años.
Por las cifras reportadas del IMSS en 2022, había casi 1,000 accidentes cada día, dato que implica un crecimiento mayor al avance de la población asegurada en ese mismo año.
Pero fuera de las cifras diarias, mensuales o anuales, esto significa que aún tenemos mucho que hacer en la cultura de la prevención, analicemos aquí las principales causas, el 85% de los casos reportados son por descuidos o acciones inapropiadas de los trabajadores, exponiéndose en posiciones peligrosas, uso inapropiado de las manos, fallas en el aseguramiento del equipo, operación de maquinaria en velocidades inseguras, no usar equipo de protección o hacerlo de forma inapropiada.
El escenario hace necesario la identificación de los lugares de mayor riesgo en cada área o zona de trabajo por una firma especialista en evaluar el tipo de riesgo, detectando la inestabilidad y seguridad laboral. Sin embargo, los principales detonadores de la inseguridad son los propios trabajadores por su baja capacidad de evitar riesgos al subestimar los riesgos latentes.
Más allá del reporte de la identificación de los lugares o zonas de mayor riesgo en los lugares de trabajo, la necesidad de la concientización de los trabajadores por sus conductas inseguras se especifica la capacitación y comunicación por parte de los líderes laborales y la realización de evaluaciones frecuentes.
Los procesos de comunicación interna en las empresas y en la construcción, podrían ayudar a disminuir la cantidad del mayor número reportado que es en las manos, muñecas, tobillos, pies y cabeza.
Es así que, en el marco del Día mundial de la seguridad y salud en el trabajo en abril de 2024, el IMSS lanzó una campaña de prevención de accidentes de trabajo en mano y tobillo, a fin de promover la cultura de prevención de mejores prácticas en materia de seguridad y salud en el trabajo, ya que el 60% de las incapacidades son en traumatología y ortopedia. Por ello la necesidad de reforzar la campaña con capacitación e identificación de los factores de causa de riesgo y buscar disminuirlos.
En uno de los estudios más recientes en 2019, la Administración de seguridad y salud ocupacional (por sus siglas en inglés, OSHA) determinó los 4 accidentes más comunes en la industria de la construcción en México responsables de cerca del 60% del total de accidentes.
Las caídas con 33.5%, la mayor causa de accidentes de altura (desde más de 1.80 m) No hay distinción entre caídas bajas y altas, por tanto, en cualquier trabajo en altura se requiere de protección para prevenir o minimizar el riesgo de lesiones.
La electrocución 10%, aunque muchas electrocuciones mortales suceden mientras se trabaja con el cableado eléctrico, gran número de trabajadores que no son electricistas mueren electrocutados. Los cables expuestos durante las construcciones y demolición, cableados defectuosos y algunos otros problemas.
Los golpes con objetos volantes o en caída 10%, los objetos volantes constituyen un riesgo mortal en todo tipo de obras en construcción (herramientas manuales o eléctricas, escombros y materiales de construcción)
Quedar atrapado 2%, esto constituye accidentes como el quedar atrapado detrás de un camión de construcción o por debajo de una carga de materiales. Aunque representan menos del 2% de las muertes, a menudo están entre los accidentes mortales más trágicos de la Industria de construcción.
Lejos de los números y porcentajes, concentremos nuestra atención a las causas, la importancia de prestar mucha atención a la seguridad, a los protocolos, a la concientización de los trabajadores, a la capacitación y a el uso adecuado de los equipos de seguridad que son claramente destinados a proteger la vida de las personas.
Por Roberto Domínguez Franco